Entramos de sopetón en una época de celebraciones. Cuando no es una comida o una cena de trabajo, serán las reuniones con familia y amigos. En definitiva, nos encontramos con una agitada agenda social y lo que ello conlleva. Para una persona que sufre de dolores de cabeza supone cuando menos someterse a una situación de estrés -sí, leemos bien- de estrés porque de repente se exponen a varios factores: